Comunidad Budista Zen Luz del Dharma
En Santa Cruz de Tenerife a 8 de septiembre de 2020
Estimados practicantes:
Comencé a practicar la meditación zen en el año 1989 de la mano del que fue mi primer maestro Dokushô Villalba Roshi. Han pasado 31 años.
Siguiendo el Programa de Práctica y Estudio de la Comunidad Budista Soto Zen (CBSZ) – Luz Serena, que él preside y dirige, recibí de su mano la Toma de Refugio, la ordenación de bodhisattva, la certificación como profesor del Programa de Estudios Budistas, así como la de instructor de meditación zen. Finalmente, completando de forma satisfactoria la formación, el 31 de diciembre del año 2005 se produjo la transmisión del Dharma, convirtiéndome en maestro zen y vicepresidente de la CBSZ.
Durante los siguientes años continué a su lado, ejerciendo como vicepresidente y apoyándolo en la difusión del budismo, asesorando a los distintos centros zen adscritos a la mencionada comunidad de la que formaba parte y desarrollando, al mismo tiempo, mi labor como maestro de Dharma. A partir del año 2011 nuestra relación se deteriora al sentir serias discrepancias con su manera de ser y proceder, formas que no eran afines a mi corazón y no coinciden con la comprensión que mantengo del Dharma del Buda.
Por todo ello, en el año 2016 acordamos, ambos, que debíamos seguir caminos distintos, suspendiendo la relación discipular y, por tanto, el vínculo que nos mantenía unidos. Se inició así un proceso legal, para que cada cual se ocupara de sus respectivas comunidades, por lo que se llegó finalmente al acuerdo de formulación de unos nuevos estatutos, de manera que la antigua Comunidad Budista Soto Zen Canaria dejó de estar adscrita a la CBSZ-Luz Serena, es decir, se independizó, naciendo de esta forma la actual Comunidad Budista Zen Luz del Dharma, entidad religiosa que dirijo y presido y que está reconocida como tal e inscrita en el Registro de Entidades Religiosas del Ministerio de Justicia con el número 014861 (2422-SG/A) y con CIF R3800520C, teniendo su sede en Santa Cruz de Tenerife y que viene desarrollando sus actividades tanto en las islas como en la península ibérica.
Nuestra Comunidad Budista Zen Luz del Dharma se ha visto emocionalmente afectada por sus palabras, así como por el contenido de su comunicado público, emitido en el día de ayer, que no compartimos ni aceptamos. Depositamos nuestra confianza en que se mantengan los lazos de respeto, tolerancia y amistad espiritual.
Siento un hondo pesar por lo que manifiesta el maestro Dokushô Villalba Roshi. Sigue siendo una persona por la que siento un gran agradecimiento por los años compartidos y, especialmente, por toda la formación recibida.
Deseo de todo corazón que su trabajo como maestro de Dharma continúe alimentando el despertar de la conciencia y que la sangha crezca en fortaleza y sabiduría. Continúo en el camino como maestro de Dharma, siguiendo la estela de los antiguos, entregándome a la Vía del zen con humildad y sincera gratitud.
Denkô Mesa